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Instalaciones de autoconsumo, una oportunidad que no debemos dejar escapar

 

El autoconsumo se ha convertido en una pieza clave en la transición energética. La instalación de placas solares fotovoltaicas es la mejor solución para impulsar el autoconsumo y que las empresas puedan ahorrar y abaratar la factura de la luz.

Tenemos que aprovechar el momento que atraviesa la industria solar fotovoltaica en España.

En España contamos con el mayor recurso solar de Europa pero es completamente dependiente energéticamente. Tenemos el potencial para poder ir progresivamente eliminando los combustibles fósiles y pasar a consumir una energía propia, limpia y sin coste alguno, la energía del sol.

Los instalaciones de autoconsumo fotovoltaico ya tienen precios muy competitivos, pero además, existe unas determinadas ayudas económicas que pueden hacer que la instalación de autoconsumo salga a un coste muy reducido. Las ayudas para particulares, pueden llegar a cubrir más del 50% del importe de la instalación, pero además existe una deducción fiscal en el IRPF para la parte no subvencionada y, en algunos municipios, una bonificación en el IBI. Puedes acceder a una instalación de autoconsumo por un coste muy pequeño. Si tienes un tejado, ya sea propio o de la comunidad, no lo dudes ni un segundo. Es el momento.

La Ley de Autoconsumo de 2019 permite producir electricidad en común, volcar la energía sobrante a la red y cobrar por ella. En el caso de edificios particulares y comunidades, la normativa actual contempla que es necesario un acuerdo del 33% de una comunidad para instalar placas solares fotovoltaicas, independiente del número de personas que lo vayan a disfrutar.

Al precio actual de la electricidad, una instalación de autoconsumo, con una vida útil de unos 25 años, se puede llegar a amortizar en cuatro años, eso sin contar el descuento recibido por las subvenciones.

Invertir en autoconsumo es un auténtico chollo, tanto para la libertad de los usuarios como para el bienestar del medio ambiente.

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